Los niños quieren hacer la mayoría de cosas que hacen sus padres. Cuando los involucras en la cocina desde una edad temprana tendrán muchas más probabilidades de continuar cocinando y comiendo alimentos más saludables al crecer. Utiliza estas sencillas lecciones de cocina para enseñar a tus hijos algunos buenos hábitos e inspirar su creatividad culinaria.
- Medir: Dado que medir es un proceso clave de la cocina, enseñar a los niños este paso básico puede mejorar su capacidad para seguir recetas escritas. Distribuye las tazas y las cucharas y que los niños comiencen a medir los ingredientes. Como todavía están aprendiendo, debes verificar dos veces antes de agregar tus porciones a tu receta. Prueba la receta de Mini Gold Medallones y que ellos sean los que midan los ingredientes.
- Cortar y picar (con precaución): Los niños mayores y los adolescentes pueden pasar a cortar en cubitos y picar. ¡Asegúrate de supervisar con mucho cuidado!
- Mezclar: Revolver es una de las tareas más sencillas a la hora de cocinar, a los niños les encantará tener manos a la obra con un batidor, una espátula o incluso con las manos. Si te preocupa que la mitad de la comida termine en el piso, asegúrate de obtener un tazón para mezclar extra grande con lados altos para evitar el desorden.
- Prueba de sabor: Definitivamente la tarea más fácil de esta lista, darle a tus hijos un pequeño bocado de los platos antes de servirlos puede ayudarlos a sentirse más involucrados en el proceso. Su opinión es muy importante, por lo que puedes preguntarles si les hace falta sabor.
- Emplatado: Anima a tus hijos a agregar un toque artístico. Estas técnicas de emplatado son formas divertidas y fáciles. ¡Verás cómo les encantará!
- Limpieza: Este es el paso que la mayoría de la gente teme, pero es donde se forma la disciplina. Y seamos realistas, siempre es bueno obtener ayuda adicional para lavar los platos.